Lidia Bedman: La sombra que susurra al oído de VOX
- minervarodriguezma
- 12 feb
- 7 Min. de lectura
Por MINERVA RODRIGUEZ, Periodismo de Investigación
Instagram vs. Realidad: La doble vida de Lady Vox
El poder en la sombra
Mientras Vox critica el despilfarro de dinero público, su red económica presenta una realidad diferente. Lidia Bedman, esposa de Santiago Abascal y madre de sus tres hijos, ha estado vinculada a esta estructura de forma significativa. Se ha revelado que, entre 2019 y 2022, facturó 63.600 euros anuales a Editorial Ivat SL por "consultoría en redes sociales", una empresa asociada al Grupo Intereconomía, histórico aliado mediático del partido.
Sin embargo, Lidia Bedman no es solo la esposa de Abascal ni una influencer que proyecta una vida perfecta. Su influencia trasciende las redes sociales y se extiende a los pasillos del poder, en reuniones discretas que no se hacen públicas. Aunque algunos la perciben como una figura pasiva en el ascenso de Vox, quienes han trabajado de cerca con ella aseguran que su rol es mucho más estratégico. "No es una mujer florero", comenta un excolaborador del partido. Bedman ha demostrado tener un talento particular para estar en el lugar adecuado en el momento oportuno. No es casualidad que, en sus primeros años, haya trabajado como secretaria de Alejo Vidal-Quadras, uno de los cofundadores de Vox. Fue en esa etapa donde empezó a comprender el funcionamiento del poder político y las finanzas detrás de las decisiones importantes.
En esos años, Bedman tuvo acceso a documentos clave que otros desconocían, entre ellos detalles sobre casi un millón de euros que Vox recibió de una organización iraní, el Consejo Nacional de Resistencia Iraní (CNRI). Este dinero fue fundamental para el despegue del partido. Sin embargo, según algunos analistas, no fue un acto altruista, sino una inversión que garantizó lealtades dentro del partido.
En 2014, cuando Vidal-Quadras comenzaba a ser relegado en el partido, Bedman, según exafiliados, ya había entablado una relación personal con Santiago Abascal. Se señala que, en ese momento, ella habría filtrado información sobre la situación financiera del partido a Abascal, lo que facilitó su desmarque de Vidal-Quadras y el control total de Abascal sobre Vox. "Santiago es el rostro visible, pero Lidia asegura que nadie le haga sombra", comenta un exdirigente del partido.
Esta narrativa de lealtades y alianzas internas dentro de Vox es recurrente, donde la lealtad al líder parece estar vinculada a un sistema económico en el que las relaciones y los apoyos se aseguran a través de acuerdos financieros.
Si hay algo que Lidia Bedman y Santiago Abascal han aprendido bien es que la política no se sostiene con discursos, sino con dinero. Y en Vox, el dinero fluye, pero a cambio de lealtad absoluta. Según exmiembros del partido, todos los cargos electos deben entregar como mínimo la mitad de sus subvenciones públicas a las arcas del partido. No es opcional. “Si no pagas, te marcan. Te quedas sin apoyos y, tarde o temprano, te vas”, explica un antiguo concejal. El dinero recaudado no desaparece. Se canaliza a través de fundaciones, asociaciones y empresas vinculadas a Vox:
• Fundación Disenso: Ha recibido más de 7 millones de euros del partido entre 2020 y 2024. Parte de ese dinero se ha usado para viajes y encuentros con figuras de la extrema derecha internacional, mientras su revista digital, La Gaceta de la Iberosfera, apenas consigue 28.000 lectores anuales.
• ISSEP España una rama del Institut de Sciences Sociales, Economiques et Politiques (Instituto de Ciencias Sociales, Económicas y Políticas) : Un centro de formación política ligado a Marine Le Pen, cuya directora es Marion Marechal, su sobrina. En ISSEP hay profesores tan variopintos como Tebas, el jefe de LaLiga, Luis Del Rivero, exvicepresidente del Real Madrid, Jose Antonio Fuster (cuya formación reglada, según su curriculum en la Página de la Asamblea de Madrid, no ha superado el Bachillerato), el exministro Mayor Oreja, Toni Cantó y un largo etcetera.
Los cursos, según exalumnos, carecen de validez académica. “Nos dieron PDFs reciclados de Twitter y de las redes del partido. No era formación, era puro adoctrinamiento. Según ellos, la doctrina del partido eran los discursos de Abascal y de Buxadé”, confiesa un antiguo estudiante, “los precios eran desorbitados, te hacían creer que eras especial, que si hacías esos cursos ibas a escalar en el partido, te daban facilidades de pago y te aconsejaban que pagaras con el dinero público de las subvenciones. Eran cursos inútiles, que ya estaban gratis en la plataforma de Formación para cargos orgánicos y electos del partido, pero que daban esa seguridad de que si te apuntabas, ibas a ser una especie de elegido”.
• Editorial Ivat SL, la empresa del grupo Intereconomia, que habría pagado 63.600 euros anuales a Lidia Bedman, esposa de Abascal, entre 2019 y 2022 por supuestos servicios de consultoría en redes sociales y marketing. Estas facturas han generado sospechas sobre el verdadero destino de esos fondos y su relación con la estructura financiera del partido. Ivat SL comparte dirección con el Instituto ISSEP, lo que demuestra su vinculación directa con el entramado de VOX. Bedman habría facturado los 63.600 euros anuales por “consultoría en redes sociales”, aunque empleados de la empresa admiten que “aquí no hay equipo de marketing, solo almacenamos libros en cajas”.
•La gestión de Veracruz Comunicación SL por parte de José Antonio Fúster(actual portavoz nacional de Vox, presidente de Vox en Madrid) hasta su traspaso a Gabriel Ariza en enero de 2024, pone de manifiesto las estrechas conexiones entre Vox y el entorno empresarial ligado a los Ariza, un apellido clave en el ecosistema mediático del partido. Este movimiento no es un hecho aislado, sino parte de un entramado en el que figuras de Vox y empresarios afines parecen intercambiar posiciones estratégicas, gestionando recursos y espacios de influencia. La falta de transparencia en estas operaciones despierta sospechas sobre la existencia de una red financiera opaca, diseñada para beneficiar a dirigentes del partido y consolidar su estructura de poder.
•La consultora política Tizona Comunicación SL, dirigida por Gabriel Ariza, ha desempeñado un papel clave en la estrategia electoral y comunicativa de Vox desde 2019. Sin embargo, su vinculación con el partido de Santiago Abascal va más allá de la simple asesoría.Ariza también está al frente de la Editorial Ivat SL.
El entramado no se detiene ahí. Tizona Comunicación ha trabajado no solo para Vox, sino también para la Fundación Disenso, el think tank del partido. Además, otra empresa de Ariza, Lepanto Estrategy SL, es la encargada de gestionar La Gaceta de la Iberosfera, un medio digital que mantiene un acuerdo de colaboración con Disenso.
Estos vínculos han despertado interrogantes sobre el funcionamiento interno de Vox y el papel de estas empresas en su financiación y estrategia de comunicación. ¿Se trata de una red de influencia mediática o de un esquema de financiamiento opaco? La relación entre Tizona, Abascal y Bedman sigue siendo un tema de escrutinio.
En paralelo, Vox ha destinado ingentes cantidades de dinero a asociaciones ultraconservadoras en Andalucía. Fondos públicos que han acabado en grupos provida y en organizaciones religiosas afines al partido.
Ex miembros del partido en Andalucía afirman que "Mantienen un entramado de ONGs que también reciben subvenciones". El partido ha convertido la política en un negocio familiar donde los sacrificios los hacen otros. "Es el símbolo de una élite que predica austeridad mientras vive de fondos públicos, denuncian las ‘paguitas’, pero viven de ellas”, ironiza un economista.
Una mujer que marca el territorio
Pero si hay un ámbito donde la influencia de Lidia Bedman se nota especialmente, es en el control que ejerce sobre las mujeres que rodean a Abascal. “Olona, Borrás, Millán… Todas han sentido su presencia. En Vox dicen que hay una regla no escrita: ninguna mujer puede estar demasiado cerca de Santiago sin pasar antes por el filtro de Lidia”,explica una persona que trabajó en la cúpula del partido. Las relaciones de Abascal con algunas dirigentes de Vox han sido tensas. En el caso de Macarena Olona, su abrupta salida del partido sigue rodeada de incógnitas. Lo que es seguro es que, desde que dejó Vox, han sido borrados por completo sus discursos de sus redes. Lo mismo ha ocurrido con otras figuras femeninas que en algún momento tuvieron peso dentro del partido.“Bedman no necesita enfrentarse a nadie directamente. Simplemente deja claro quién manda”, añade la misma fuente.
Y entre donaciones forzadas, cursos fantasma y redes de dinero público, una pregunta sigue en el aire: ¿Cuánto tiempo se puede mantener la imagen de influencer antes de que el poder la devore?
Una aristocracia política vestida de Zara
En Instagram, Lidia Bedman proyecta la imagen de una madre perfecta. Su casa es impecable, sus hijos sonríen, sus vestidos combinan siempre con la decoración. Pero tras esa fachada, su papel es más complejo: es una operadora política que ha sabido mover los hilos para que Vox sea un partido a la medida de su familia. Muchas marcas han apostado por ella como imagen, pero su éxito en redes también ha coincidido con el crecimiento de Vox.“Es el símbolo de una élite que predica austeridad mientras vive de fondos públicos”, concluye un economista. Empresas como L’Oréal la han contratado mientras su marido escalaba en política. Un exasesor de marketing lo explica sin rodeos: “No es solo que sea influencer, es que representa el nuevo poder. Para algunas marcas, alinearse con ella es alinearse con un movimiento político en auge”.
Todo por la pasta
Lidia Bedman encarna la paradoja de Vox: un partido que se presenta como enemigo de las élites, pero que ha construido su propia aristocracia.
Detrás de eslóganes como “España primero, todo por España”, se esconde una red de favores, sueldos inflados y formación fantasma.
Mientras Bedman posa con vestidos de cientos de euros, muchos españoles ven cómo sus impuestos financian viajes a Argentina, a Estados Unidos, mesas pagadas en los diferentes conclaves de los conservadores americanos o cursos sin profesores. En un país donde el 28% de los niños vive en pobreza, el caso Disenso no es solo una irregularidad: es un símbolo de cómo algunos convierten la política en un negocio familiar. Y mientras, Lidia sigue publicando stories jugando con su bebé… ¿Sabrá ella que ese niño crecerá en una España que paga más por pensar en el pasado que por construir su futuro?
Su historia es la de una mujer que ha sabido jugar sus cartas mejor que nadie. Mientras Abascal proclama “España ante todo”, Bedman demuestra que, en su mundo, el lema real es “los nuestros primero”. Y entre donaciones forzadas, cursos fantasma y redes de dinero público, una pregunta sigue en el aire:¿Cuánto tiempo se puede mantener la imagen de influencer antes de que el poder la devore?
Y entonces cuál es la diferencia entre Lidia Bedman y Begoña Gómez?La pregunta que se hacen con mucho desconcierto los afiliados, cargos orgánicos einstituciones es “Somos la alternativa a algo? Criticamos justamente lo que tenemos en casa?

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